Si no es normal que la colombiana Mariana Pajón no esté luchando por la victoria en una prueba de la Copa del Mundo de BMX o bicicross mucho menos lo es que ni siquiera haya sido capaz de subir al podio.
Y eso fue lo que ocurrió el pasado fin de semana en Saint Quentin, Francia, donde se disputó las dos primeras válidas de la temporada.
La ciclista de 27 años finalizó el sábado en cuarto lugar y el domingo fue incapaz de llegar a la carrera decisiva, siendo eliminada en semifinales.
El inesperado bajo rendimiento de Mariana Pajón, quien es considerada la mejor exponente de BMX de la historia, doble campeona olímpica y ganadora de múltiples títulos mundiales, llamó mucho la atención.
Razón que llevó a su hermano y consejero, Miguel Pajón, a explicar que la corredora había participado pese a acarrear “algunos quebrantos de salud”.
“Luego de ser revisada por médicos franceses y contactarse con un médico del Comité Olímpico Colombiano, la conclusión es que Mariana está sufriendo de una posible enfermedad infecciosa-viral llamada mononucleosis”.
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La monoucleosis es la principal afección relacionada con el contagio del virus Epstein-Barr o VEB, que fue descubierto hace más de 50 años por un equipo de investigadores liderados por Anthony Epstein e Yvonne Barr.
Se asocia al beso, ya que el VEB se transmite por un estrecho contacto personal, a través de fluidos corporales, principalmente la saliva.
Pero su contagio no sólo se produce de manera íntima ya que también se puede transmitir a través de la tos, catarro, objetos como vasos y cubiertos o de cualquier otro forman en que haya contacto con la saliva de una persona contaminada.
Cerca de un 95% de la población ha sido infectado con el virus, pero la mayoría permanece sana sin mayores complicaciones.
Sólo en algunas personas y bajo determinadas circunstancias es que el virus puede derivar en una serie de enfermedades aparentemente ajenas entre sí.
La infección se puede producir a cualquier edad, aunque los casos más serios se suelen presentar en la adolescencia y adultos.
De confirmarse el diagnóstico, Mariana Pajón deberá someterse a un tratamiento de dos a cuatro semanas que podría condicionar su rendimiento y participación en la próxima válida de la Copa del Mundo, que se disputará entre el 5 y 6 de mayo en Papendal, Holanda.